Cara a cara: Resident evil 5

Después de 4 años de tensa espera y promesas a medio cumplir, Resident evil 5 es una realidad al alcance de todos, siendo además la primera vez que sale de forma simultánea para varias plataformas. África es el nuevo escenario, pero la necesidad de sobrevivir sigue siendo la misma de siempre... o casi. Bievenidos a Kijuju.

El peor enemigo de una saga exitosa es, valga la redundancia, su propio éxito; la necesidad de mantener el nivel de calidad visto en anteriores entregas, y a la vez, la casi imposición de sorprender al jugador cuando el propio factor sorpresa ya ha surtido efecto en el pasado. Jun Takeuchi y Masachica Kawata, productores de Resident evil 5, parece que no han asimilado muy bien uno de esos principios básicos que debe contener cualquier secuela, y es que la experiencia que nos ofrece Resident evil 5 no pilla a nadie por sorpresa, ni siquiera al antiguo responsable de la saga, Shinji Mikami, el cual se “estresa” al comprobar el rumbo que tomó en su día el desarrollo del Resident evil que hoy tenemos entre manos. El gran Mikami, capaz de tirar por la borda gran parte del trabajo hecho si éste no le convencía (como pasó con el Resident evil 2 y el 4 respectivamente), hace notar su desaparición de la compañía nipona, y no precisamente para bien…

Pero eso es otra historia; lo que cuenta es el presente, y Resident evil 5 cambia de aires para ofrecernos un terror teñido de luz y claridad, donde el continente africano, cuna de la humanidad para muchos, es el escenario elegido para conocer el pasado, presente y futuro de no pocos protagonistas de la saga, con la nueva incorporación de Sheva Alomar, la preciosa chica africana que acompaña a Chris durante toda la aventura:”compañeros hasta el final” como dice ella. Así pues, volvemos a la dinámica de acción y más acción vista en Resident evil 4 en la que la saga ha decidido iniciar un nuevo viaje, después de varias entregas anteriores fieles al estilo survival horror convencional. En unas recientes declaraciones, Capcom ha confirmado que se cierra un ciclo y que llegarán nuevos aires, pero mientras tanto, toca hablar de las diferencias del juego que ya tenemos. Empezamos.

Calidad gráfica y rendimiento

Resident evil 5 es el típico título al que se le nota que lleva detrás altos valores de producción. Su calidad gráfica está fuera de toda duda. Siendo probablemente uno de los juegos que mejor ha sabido explotar las capacidades de las consolas de la actual generación, con un equilibrio perfecto entre detalle y amplitud de escenarios. Se ha mejorado todo (o casi todo): efectos de luz, físicas, sonido, IA, texturas, número de polígonos, saturación del color…mejoras para ofrecer una experiencia a nivel técnico no vista en anteriores entregas de la saga, teniendo además el difícil reto de mostrar un mundo hostil sin la ayuda de la siempre recurrente oscuridad; Resident evil 5 es pura luz, y a través de ella, somos partícipes de un mundo que ha ganado en inmersión, y encima, en formato multiplataforma, hacienda más meritorio el trabajo técnico.

PlayStation3

Xbox360

Siendo éste el cuarto juego de Capcom que analizamos en los cara a cara (recordemos: Devil May Cry 4, Lost Planet y Street Fighter 4), Resident evil 5, como si fuese un animal de costumbres, sigue la rutina vista en los anteriores títulos mencionados, sin llegar, por supuesto, a los extremos de vergüenza ajena de Lost Planet. Así que nos encontramos con un juego técnicamente superior en Xbox 360, en todos los apartados posibles, aunque, como siempre decimos, es mejor ir por partes.

Lo primero que llama la atención, negativamente, es el insufrible tearing que posee la versión de Xbox 360 si lo jugamos a 1080p de resolución. No es exagerado el apelativo de “insufrible”; y es que tanto en secuencias cinemáticas como en momentos ingame, el molesto efecto “corte” se hace notar más de lo debido. Y aunque la versión de la máquina de Microsoft es la única que ofrece esa resolución (lPlayStation 3 sólo llega alos 720p), se puede decir que, visto el resultado, lo recomendable es ignorar esa posibilidad y configurar la consola a 720p, al menos mientras usemos este juego. Jugándolo en esas condiciones, el tearing desaparece y el título gana en consistencia. Es fundamental que recordéis este hecho para evitar sorpresas desagradables que se dan nada más iniciar el primer capítulo. PlayStation 3 no da muestras de ningún indicio de tearing.

PlayStation3

Dejando a un lado el problema del tearing, Resident evil 5 para Xbox 360 gana en los tres puntos clave: definición, calidad y estabilidad. Definición porque el detalle de las texturas es superior en la máquina de Microsoft; no hay más que fijarse en el primer plano de la espalda de Chris, o en el cómputo general de las texturas que componen los escenarios, en los que, agudizando un poco la vista, llegaremos a comprobar que PlayStation 3 sigue sufriendo la falta de detalle, con ese extraño filtro que parece difuminar la imagen y que la hace palidecer frente a la versión de Xbox 360.

Xbox360

PlayStation3

Calidad porque, además del mayor detalle de las texturas, 360 también posee un plus de ventaja en la representación de los shaders; en este caso, tenemos la captura donde Chris está apuntado a una mesa con un amasijo de carne podrida encima, teniendo a la izquierda de la imagen una motosierra. Es precisamente ese montón de carne podrida la que evidencia no sólo una mayor definición en las texturas, sino también una ejecución más eficaz de los contrastes lumínicos que la luz provoca sobre la superficie de la poco apetecible carne. Pero además, las diferencias no acaban aquí; en uno de los capítulos que transcurre a bordo de una lancha, los reflejos sobre el agua de la vegetación y construcciones varias se mostrarán de forma más o menos eficiente en Xbox 360, mientras que en PlayStation 3, para nuestra sorpresa, esos reflejos no aparecen por ningún sitio, dando un aspecto un tanto pobre a la representación del escenario, e inevitablemente, desluciendo mucho respecto a la versión para la máquina de Microsoft. Por último, el uso del filtro antialiasing sigue siendo evidente (aunque no perfecto) en Xbox 360, mientras que PlayStation 3 adolece de unos dientes de sierra claramente apreciables. La captura con el cartel “Agency” es la idónea para apoyar esta afirmación.

Xbox360

PlayStation3

Finalmente, la estabilidad se refiere a la tasa de frames, más consistente en Xbox 360, sobre todo en los momentos de mayor carga gráfica, con la unión de enemigos, efectos de partículas o efectos climatológicos como la lluvia. En la consola de Sony se hacen más evidentes los picos de frames, mientras que en 360 disfrutaremos en una progresión en la tasa de refresco equiparable a un encefalograma plano. De todos modos, hay que insistir en que, a pesar de las diferencias, ambas versiones son razonablemente estables, sin dar problemas que pongan en aprietos la jugabilidad.

Estamos, por tanto, ante un apartado donde Xbox 360 supera claramente a PlayStation 3; las diferencias serán evidentes para unos, poco apreciables para otros, pero lo que no se puede negar es que están ahí. Como ya dijimos antes, y salvando el tropiezo de Lost Planet., Capcom ha hecho un trabajo muy digno sacando adelante un juego tan exigente como este Resident evil 5, lidiando con las dificultades a la hora de trabajar con dos consolas tan dispares en cuanto a arquitectura, aunque, probablemente, la mayor accesibilidad de Xbox 360 le permite despuntar respecto a PlayStation 3. Victoria merecida en este apartado para la máquina de Microsoft. Sin duda.

Xbox360

Tiempos de carga, audio, control y online

Otro de los puntos más conflictivos de los cara a cara (tiempos de carga) sigue al rojo vivo en el caso de Resident evil 5, teniendo alguna que otra cosa interesante que decir al respecto. Como ya sabéis por textos anteriores, Xbox 360 ofrece la posibilidad de instalar datos en el disco duro, con la nada despreciable cifra de 6,8 GB “despachados” en unos 12 minutos; PlayStation 3, al igual que Devil May Cry 4 y Lost Planet, nos obliga a hacer una instalación de 4,8 GB de 10 minutos de duración aproximadamente.

Los tiempos de carga oscilan entre los 4 y 5 segundos en ambas plataformas, aunque en este caso, la instalación de datos en el disco duro beneficia a la máquina Microsoft, acortando unos tiempos de carga que ya resultan cortos por sí solos. Estamos hablando, en el caso de que optemos por la instalación, de tiempos que oscilan entre los 2 y 3 segundos, ligerísimamente más breves que los que se dan en caso de no acceder a la instalación. Quizás el espacio invertido y el beneficio obtenido no compensen la instalación, pero la posibilidad de elegir entre instalar o no está ahí. Estamos, por tanto, ante un punto donde ambos sistemas están francamente igualados, pero los tiempos de carga son ligeramente inferiores en 360 tras la instalación, y se ofrece la posibilidad de no hacerla; en PlayStation 3 es un imperativo, y eso no nos convence. Curiosamente, Street Fighter 4 para la máquina de Sony sí ofrecía esa posibilidad (instalar o no instalar) y los beneficios eran evidentes con menos espacio usado.

PlayStation3

Xbox360

En cuestiones de audio ambas plataformas siguen luciendo a un gran nivel; se nota el gran trabajo a la hora de recrear un sonido impactante, tanto por el uso del Dolby Digital en ambas máquinas, como por pequeños detalles que los más avispados sabrán apreciar. Particularmente, nos quedamos con las diferencias en la intensidad de los gritos y ruidos que producen los enemigos cuando éstos se encuentran en zonas cerradas, fuera de nuestro alcance; el sonido se vuelve sucio, enmarañado, y la sensación de que alguien nos persigue se potencia. Por lo demás, gran recreación de los disparos, explosiones o incluso los pasos sobre distintas superficies. El sonido siempre ha sido importante en un Resident evil, y más en un género tan propenso a la insinuación de peligro a través del audio. Cumple perfectamente, se echa de menos, eso es cierto, un doblaje al castellano, ya que por el momento, ningún Resident evil ha tenido el placer de hablar en nuestro idioma, salvo los enemigos del Resident evil 4 claro está…

La configuración de los mandos de control es la siguiente, en Xbox 360, LT sirve para “preparar” el arma (apuntar); LB nos permite sacar el cuchillo; RT nos da la opción de disparar (combinándolo con LT) y localizar a nuestro compañero en caso de que lo pulsemos “a secas”; RB activa el gps/mapa, aunque en algunos momentos no estará disponible; el botón Y activa el menú de objetos (y en esta ocasión, la activación es en tiempo real); el botón B tiene varias funciones: activar la acción cooperativa con nuestro compañero, llamarlo, salvarlo cuando se encuentre en peligro golpeando al enemigo o reanimarlo cunado esté en el estado “muriendo”; X permite realizar acciones contextuales, ya sea para coger objetos dispersos por el escenario o golpear al enemigo si se presenta la ocasión; A nos permite correr al combinarlo con el stick izquierdo, o dar un gripo de 180 grados si movemos el stick izquierdo hacia atrás; la cruceta, en otra de las novedades de esta entrega, nos permite configurar accesos directos a todos aquellos objetos de nuestro interés, aunque esa configuración sólo está disponible al iniciar una partida o punto de control, y entre otras cosas, nos permite también mejorar las armas que tengamos, comprar otras (o también objetos) y retirar a un fondo común todos los objetos que sobren. Se prescinde, por tanto, del buhonero y el sistema de maletines del Resident evil 4. por lo demás, el Stick izquierdo sirve para mover al personaje, y el derecho para mover la cámara y apuntar con el arma.

Junto a la configuración por defecto A, existen otras tres alternativas (B,C Y D) para aquellos que prefieran experimentar con las distintas opciones, aunque, particularmente, nos quedamos con la configuración por defecto. Explicado el control, merece la pena explicar lo poco gratificante que puede resultar el control de Resident evil 5. Teniendo en cuenta la limpieza de sangre a la que ha sido sometida la saga, esa mezcla entre lo nuevo y lo viejo no terminar de cuajar del todo, algo que sufrimos en la cuarta entrega, y que en esta quinta parte, aún habiendo margen de mejora, no se ha actuado en consecuencia.

Xbox360

PlayStation3

Parece que Capcom tiene miedo a reconocer que su saga se ha pasado a la acción directa, y pretende conservar ciertas incoherencias con un género (la acción) que exigen más dinamismo en todas las acciones que hagamos. No es el simple hecho de no poder disparar mientras nos movemos, también “duele” la falta de algún movimiento del tipo evasivo, ya que no siempre está disponible el uso de Quick Time Events para tal fin. Curiosamente, las lacras jugables de Resident evil se arrastran desde la primera entrega, hecho que siempre se ha intentado mejorar con ciertas aportaciones, tales como el sistema de auto-apuntado o el giro automático de 180 grados, pero aún así, el radical cambio que ha tomado la saga principal obliga, de forma casi imperativa, a realizar cambios en el sistema de control; o eso, o volver a los orígenes, pero quedarse en terreno de nadie es uno de los pocos (aunque graves) defectos de este juego.

Sobre el online, poco hay que añadir a lo visto en otras ediciones de los cara a cara; funciona a la perfección en ambas máquinas, con un cooperativo que resulta delicioso por lo estable de sus partidas. Sin problemas. Hay que decir que junto al modo online, también existe un modo cooperativo a pantalla partida (un poco incómoda la disposición de las pantallas en este modo) y un añadido exclusivo de la versión de Xbox 360 que comentaremos ahora mismo.

Otras consideraciones

Ambas versiones poseen un sistema de logros, en el caso de Xbox 360, y trofeos si hablamos de PlayStation. En total, 50 logros y 51 trofeos (uno más) para PlayStation 3; la variedad está servida, y para su consecución habrá que terminar con éxito los distintos capítulos del juego, matar enemigos en determinadas circunstancias, encontrar tesoros o destruir los emblemas de la BSAA escondidos por el escenario (algunos muy bien escondidos, por cierto). Por lo demás, ambas máquinas son compatibles con la función de vibración y PlayStation 3 no hace uso del sensor de movimiento.

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Como ya dijimos en apartados anteriores, la instalación de datos en el disco duro es obligatorio en el caso de PlayStation 3 y opcional (como siempre, tras la actualización) en Xbox 360. La única novedad reseñable en este apartado beneficia a Xbox 360, y es que la máquina de Microsoft permite la interconexión de sistemas (es decir, conectar dos consolas entre sí, con sus respectivos dos televisores, para poder jugar de forma cooperativa) opción no disponible en la consola de Sony. Es cierto que este modo será el menos usado de todos los restantes disponibles (cooperativo online u offline a través del modo pantalla partida) pero al menos existe la posibilidad de usarlo, esta ahí.

Veredicto final

Parece que Capcom se siente más cómoda trabajando con Xbox 360, algo insultantemente evidente en Lost Planet, y más sutil en los juegos restantes, como este Resident evil 5. Está claro, que tras las muchas entregas de los cara a cara, la consola de Microsoft se lleva la palma en lo que a juegos multiplataforma se refiere. ¿Los motivos? Es difícil saberlo, esa respuesta sólo la tienen las personas que trabajan en primera línea de fuego con los juegos, y también los ingenieros encargados de diseñar la arquitectura interna de ambos sistemas, nosotros sólo podemos hacer hipótesis, pero parece que la respuesta podría estar en las mayores facilidades que ofrece Xbox 360 a la hora de sacarle provecho, mientras que la tecnología un tanto precoz de PlayStation 3 le está jugando malas pasadas, aunque la capacidad de esta consola para mover cosas espectaculares ha quedado más que clara con el impepinable Killzone 2. PlayStation 3 muestra su mejor cara con los juegos exclusivos, los “multi” son otro cantar.

Xbox360

PlayStation3

Por tanto, Xbox 360 es la versión superior en prácticamente todos los apartados; técnicamente se ve mejor (tanto por detalle como por calidad de imagen) y se juega mejor, al menos si nos quitamos de la cabeza la idea de jugar a 1080p, con el molesto e insufrible tearing de por medio. Por otra parte, la instalación opcional beneficia, aunque sea sutilmente, los tiempos de carga, a costa de un consumo de gigas elevado (6,8 GB); PlayStation 3 nos obliga a hacer una instalación nada más meter el juego en el lector, algo que no termina de entenderse teniendo en cuenta que la capacidad de los discos duros de serie de esta máquina no están para demasiadas florituras a la hora de soportar instalaciones, y es que el caso de Resident evil 5 no es el único, por desgracia. Criticamos, por tanto, el no poder elegir entre instalar y no instalar. Por último, comentar el detallito de poder conectar dos consolas para jugar en modo cooperativo en Xbox 360, opción no disponible en PlayStation 3.

¿Diferencias notables? No necesariamente, como todo, depende de la persona el establecer que esas diferencias sean significativas o no. En nuestro, son quizás más evidentes que en otros títulos, y es que el conjunto resulta superior en Xbox 360, y no se puede negar que esas diferencias están ahí, para el que quiera verlas, y para el que no quiera verlas, también. ¿Es equivocando adquirir la versión de PlayStation 3? No, hay circunstancias que se escapan a nuestro control, y es posible que algún usuario prefiera la versión para la máquina de Sony ya que puede ser la plataforma donde tenga más amigos disponibles a la hora de poder disfrutar del modo cooperativo online; del mismo modo, la versión de PlayStation 3 es muy decente, aunque inferior a Xbox 360. Resident evil 5 ha llegado al mercado en dos ediciones, normal y coleccionista. La coleccionista, además de venir en una preciosa caja metálica, trae un dvd con el “cómo se hizo” por 10 euros más respecto al precio normal. Aún así, la edición coleccionista europea no es equiparable a las de otros territorios, mucho más generosas en cuanto a contenido.

Fuente: Meristation